Estudio biomecánico

¿Qué es un Estudio biomecánico?

El estudio biomecánico nos permite valorar la funcionalidad del pie.

  1. Exploración en la camilla: valoramos las diferentes articulaciones (pie, rodilla, cadera) y a nivel muscular.
  2. Exploración en bipedestación (de pie): valoramos la alineación del cuerpo, compensaciones y cómo se comportan nuestros pies al soportar nuestro peso mediante diferentes test clínicos.
  3. Análisis de la marcha: observamos cómo se comporta el pie para ver su funcionalidad y cómo influye todo lo visto anteriormente.

    El análisis de la marcha y el estudio biomecánico nos permite analizar y diagnosticar patologías o anomalías de nuestro aparato locomotor, de esta forma, en caso de que se considere necesario, poder realizar un tratamiento efectivo y adecuado.

    A modo preventivo también nos permite detectar a tiempo patologías que a la larga pueden empeorar o pueden convertirse en futuras dolencias.

    Si estás interesado en conocer tu pisada y en realizarte un estudio biomecánico, no dudes en contactar con nosotros.

    NOTA: Recomendamos acudir con ropa cómoda y elástica o, incluso, pantalones cortos. Además, de traer el calzado habitual para poder examinarlo.

    • Detectar a tiempo posibles futuras lesiones y dolencias.
    • Conocer cómo se comporta nuestro pie y cómo afecta a nuestro cuerpo.
    • Tratar de forma más eficaz dolencias como: sobrecargas, callosidades o puntos de presión.
    • Identificar estructuras que causan dolor por una marcha no funcional.
    • Revisar el crecimiento de los más pequeños y detectar a tiempo cualquier anomalía o patología, para poder tratarla y mejorar su pronóstico.

    El estudio de la pisada se puede realizar a cualquier edad.

    Es recomendable que la primera visita al podólogo sea a los 3-4 años para comprobar que hay un crecimiento sano y correcto. Siempre que no se detecte algo muy llamativo a una edad más temprana.

    Se recomienda acudir si presentas dolor en la planta del pie al levantarte o al estar mucho tiempo andando, dolor en la zona de debajo de los dedos, callosidades o puntos dolorosos en el pie, pies aplanados, esguinces de repetición, entre otros.

    Durante la infancia se aconseja especialmente si refieren dolor de talón al realizar actividad física, si se quejan de los pies al andar, si se caen con frecuencia, si meten los pies hacia dentro, andan de puntillas o dando “saltitos”, o si notamos cualquier anomalía.

    Durante la visita, nos esforzamos por explicarlo todo lo más sencillo posible para que puedas entender cómo funcionan tus pies y cómo influyen al resto del cuerpo.

    Al final de la consulta, se resume lo más destacado del análisis de la marcha y, en caso que sea necesario, enumeraremos los objetivos de tratamiento.

    Aunque en muchos casos es necesaria la confección de unas plantillas personalizadas, todo depende del diagnóstico, el pronóstico y de diferentes factores que tenemos en cuenta para realizar el tratamiento más personalizado e individualizado a cada paciente.